miércoles, 17 de marzo de 2010

17 de marzo.

Leyendo mientras me releo en una hoja de papel, que ni es de papel ni es mía, con todas esas deformidades que trae la idea de propiedad, y ese frío que se percibe como ventana hacia el mundo, algunos días de aquellos que tocan a la puerta de tu mente, ciudad de-mente, en fin de mes.

La libertad...

Ninguna imagen tan bella como la de un ser que cree en la libertad y que además aspira a ella como su máxima, pasión y empresa universal. De todos (todas, todos, todo) es propia, como las ideas bellas, como las imágenes radiantes, que no llegan a los ojos, a lo sumo nacerán del mundo puesto ante ellos, sino que simples y pintorescas - en negro o en color o en nada - aspiraciones.

La naturaleza se mueve, camina la vida. Lírica.

Lo bello...

Tanto como lo feo, que salido de las palabras, tan simples, termina siendo lo mismo...pasión.

Bello silencio.

Cuando creo que me leo en una hoja de papel, que no es de papel ni es mía, me da ese aliento de bañarme en tinta y dejarme caer sobre un papel; aunque no sea de papel ni sea de tinta este embadurnamiento.

1 comentario:

Maisa dijo...

hay libertad que algunas veces te arrastra hacia la soledad, y hay soledad que aveces te abre las puertas de la libertad.

Yo sigo extrañandote niño bueno